miércoles, 12 de mayo de 2010

Muchas Veces

Muchas veces, escribo siendo otra persona, como viendo por otro punto de vista lo que sucede con la vida o mejor dicho con mi vida.
Muchas veces decidí cambiar el rumbo de mi vida, cambiar de persona, cambiar de look, en fin... Cambiar.
Pero me di cuenta que no solo hace falta cambiar uno mismo sino que también el otro tiene que cambiar, muchas veces hace falta el aporte de la otra persona para avanzar, como siempre digo, las cosas se hacen de a dos.
Hoy pude ver o mejor dicho darme cuenta {Gracias gimnasio y vero} que muchas personas cambian o cambiaron, y que lamentablemente, mi grado de confianza se esta perdiendo evidentemente hacia esas personas, yo soy de esas personas que podes confiar en ellas, que te van a ayudar cuando tengas un problema, pero soy una ilusa porque siempre espere que me devolvieran los mismo que yo daba, y me equivoque a una gran escala.
En esta semana, me di cuenta de esto, y lamentablemente, ya no se puede volver atrás, y aunque duela, es así, muchas veces digo que de los errores se aprende, yo tengo la puta costumbre de darme con un mínimo de 8 veces la cabeza contra la pared para aprender, porque: o no me quiero dar cuenta de las reacciones que tiene esa persona porque no lo quiero ver, o sencillamente porque sigo pensando que esa persona no cambio cuando realmente cambio.
Capaz el porque no me quiero dar cuenta de esos cambios es porque aprecio tanto a esa persona que no quiero ver que cambio y cambio para mal, y si no es eso, nose porque es, el punto de cuestión es que si nos seguimos dejando llevar por la gente por las amistades, familias, novios etc, vamos muy mal, y el resultado es simple: El alejamiento

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Datos personales

Demasiadas veces tenemos miedo. Miedo de lo que podríamos no ser capaces de hacer. Miedo de lo que podrían pensar si lo intentamos. Dejamos qu nuestros temores se apoderen de nuestras esperanzas. Decimos que no cuando queremos decir sí. Nos callamos cuando queremos gritar y gritamos con todo cuando deberíamos cerrar la boca. ¿Por qué? Después de todo sólo vivimos una vez. No hay tiempo de tener miedo. Entonces BASTA. Hacé algo que nunca hiciste, atrevete. Olvidate de que te están mirando. Intentá la jugada imposible. Corré el riesgo. No te preocupes por ser aceptado. No te conformes con ser uno más. Nada te ata, nadie te obliga. Se vos mismo. No tenés nada que perder y tenes todo, todo, por ganar.